Gracias a mi trabajo tengo la oportunidad de observar la vida desde la altura de los niños, que obviamente es muy distinta a la nuestra, por ejemplo para ellos los tiempos muchas veces son cortos y para nosotros una eternidad, especialmente cuando juegan y se pierden en ese mundo lúdico y creativo, o al revés, un corto viaje, para ellos puede ser tan largo como si lo hiciéramos en cámara lenta.
Admiro la forma ingenua y sencilla de resolver los problemas, la manera rontal y desinhibida de hacer preguntas y observar el mundo, me gustaría tener más tiempo para disfrutarlos y escucharlos, con 36 alumnos se me diiculta, pero no es imposible.
La foto no es mía, pero la edición sí, si averiguo el autor lo publico, lo saqué de tumblr.
2 comentarios:
Cuánto se aprende de los niños!
Ojalá pudiéramos conservar en la edad adulta esa capacidad de asombro frente a la vida!
Saludos
es excelente la foto, yo soy estudiante de arquitectura y la mayoria de veces nos hacen que miremos a los niños, que volvamos a nuestros tiempos de infancia para volar con la imaginacion en donde todo era posible de construir, son buenos maestros. saludos !
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