Avanti!
Si te postran diez veces, te levantas
otras diez, otras cien, otras quinientas:
no han de ser tus caídas tan violentas
ni tampoco, por ley, han de ser tantas.
Con el hambre genial con que las plantas
asimilan el humus avarientas,
deglutiendo el rencor de las afrentas
se formaron los santos y las santas.
Obsesión casi asnal, para ser fuerte,
nada más necesita la criatura,
y en cualquier infeliz se me figura
que se mellan los garfios de la suerte...
¡Todos los incurables tienen cura
cinco segundos antes de su muerte!
Almafuerte.
¡Piu Avanti!
No te des por vencido, ni aun vencido,
no te sientas esclavo, ni aun esclavo;
trémulo de pavor, piénsate bravo,
y arremete feroz, ya mal herido.
Ten el tesón del clavo enmohecido
que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo;
no la cobarde estupidez del pavo
que amaina su plumaje al primer ruido.
Procede como Dios que nunca llora;
o como Lucifer, que nunca reza;
o como el robledal, cuya grandeza
necesita del agua y no la implora...
Que muerda y vocifere vengadora,
ya rodando en el polvo, tu cabeza!
Almafuerte
5 comentarios:
Cecilia muy bonito el poema...me encanta lo del roble que no implora...mi tierra esta llena de robles y encinas...son arboles que siempre me han inspirado fuerza...
Espero estés teniendo buena semana...
un abrazo
Creo que el Piu Avanti es el único poema que mi papá sabe de memoria... Estaba sobre el teléfono en la casa de mi abuela así que medio que terminamos todos aprendiéndolo!
Un beso
Hermosos poemas! Piu avanti es uno de los que les doy a mis alumnos porque a los chicos les encanta.
Besos Ceci!
Justo lo leía, recordaba cuando me hicieron leerlo en el colegio y pensaba si aun hoy los maestros lo compartirían con sus alumnos y entonces leo el comentario de Fer, que bueno!
beso!
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